Verónica no tiene un pelo de tonta. Es más, sospecha de las turbios comportamientos de su esposo, Matías Bennet quien está involucrándose con una alumna de su curso de la universidad. 

Pero inesperadamente apareció un hombre en su vida, uno que le trae buenos recuerdos de su juventud. Ambos se juntaron y estuvieron a punto de besarse, pero para remediar la casi inminente traición, Verónica intentó seducir a su marido sin éxito. 

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