En medio de una ola de arriendos en que los chilenos han privilegiado esta forma de habitar una vivienda, son varios los que han logrado invertir en departamentos, principalmente para poder arrendarlos y así pagar el dividendo con la renta que produce el negocio.
Así lo hizo Gissella Gallardo, que invirtió en un departamento en Estación Central, el cual arrendó a una mujer venezolana que puso coko aval a su hermano. Sin embargo, la arrendataria dejó de pagar el arriendo, pero no solo eso, también los servicios básicos, dejando a la expareja de Mauricio Pinilla con una deuda de alrededor de 3 millones de pesos.
"Todo estaba a mal traer"
Según contó a LUN, la periodista logró arrendar el inmueble hace ocho meses, donde cobraba $260 mil mensuales. "En vista de que no pagaban, el corredor la llamó para que dejara la propiedad y nunca atendió", comenzó relatando Gallardo.
"Cuando fue la corredora a tocar la puerta se enteraron que ya no había nadie viviendo ahí. No avisaron que se habían ido", explicó la influencer. Tras esta situación, la comunicadora decidió revisar y se dio cuenta que las deudas y daños alcanzaban una cifra de casi 3 millones de pesos.
Según comentó, la arrendataria comenzó a llevarse sus pertenencias de a poco para no levantar sospechas: "Empezó a sacar las cosas de a poco, las empezó a sacar en horarios donde los conserjes dormían, porque nadie vio ni escuchó nada".
Luego, para poder entrar a la propiedad, debieron romper la chapa y es ahí donde se encuentran con el peor escenario. "Todo estaba a mal traer. Las condiciones en que lo dejaron: las puertas rotas, la alfombra asquerosa, las paredes también. Tenía un mueble para poner el televisor que lo había dejado ahí y estaba todo roto. Hasta las cañerías estaban rotas. Puros destrozos", concluyó.