Simón Oliveros se trasladó a la comuna de El Bosque para visibilizar la realidad de los vecinos que conviven hace cinco años con un basural entre edificios. Cerca de 300 familias deben soportar un deprimente paisaje, malos olores a toda hora y riesgos de delincuencia. 

Un problema endémico en dos villas sociales que amenaza como foco de infección. La empresa constructora cumplió con el cierre perimetral, pero la municipalidad no ha podido intervenir, puesto que el terreno es privado. 

"No hemos recibido ayuda de nadie. Aquí nadie ha venido y a dicho vamos a buscar una solución para ustedes", sostuvo una de las vecinas afectadas. 

Revisa el reportaje MG de Simón Oliveros.