Los vecinos de la famosa Villa Frei de Ñuñoa se organizaron para luchar contra la delincuencia. Esto luego de detectar que las cámaras de seguridad que administra el Municipio no apuntaban a donde ellos consideraban que debían hacerlo; sus propias casas.
A partir de ello, decidieron comprar 150 cámaras que son monitoreadas vía internet por todos los habitantes del vecindario. Después de poner en practica esta medida los robos han disminuido notoriamente. Además, lograron desenmascarar a una banda de 'bicichorros' que frecuentaba la comuna para delinquir.