El incendio porteño no sólo afectó a los habitantes de los cerros, sino que también a cientos de animalitos y mascotas que hoy tienen secuelas en cuerpo y mente.  Los voluntarios los cuidan día y noche, durante las 24 horas del día y sueñan con tener un hospital para estos seres llenos de amor.

Desde diversos lados del país han llegado para prestar asistencia a las mascotas más necesitadas. La organización llega a tal nivel que cada animal tiene su ficha de paciente.

Mira todos los detalles en la siguiente nota de Kathy Salosny.