Luego de una intenso día 18 de octubre donde miles de ciudadanos se congregaron en Plaza Italia de manera pacífica y controlada, al final de la jornada comenzaron a producirse hechos delictuales que impactaron a todos. Dos iglesias fueron incendiadas brutalmente por grupos minoritarios que se desmarcaron de la concentración tranquila de Plaza Baquedano y se dirigieron a la Iglesia de la Asunción que terminó con su cúpula completamente incendiada y posteriormente derrumbada ante la mirada de bomberos, vecinos y manifestantes.

Esta mañana los vecinos pudieron ver el daño del lugar y también expresar que si bien se encuentran de acuerdo con las demandas sociales y las manifestaciones pacíficas no puede ser que su barrio esté tan dañado. 

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