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Contrabando de joyas y relojes: ¿Quiénes están detrás de este mercado negro en Chile?

  • Por Mega.cl
Contrabando de joyas y relojes: ¿Quiénes están detrás de este mercado negro en Chile?

Hace algunos días se destapó la investigación de la Fiscalía Occidente a cerca de 100 personas, producto del contrabando y receptación de joyas y relojes robados en el extranjero y que involucra a conocidas figuras del espectáculo nacional, como "Parived", marido de Tonka Tomicic.

Por esta situación, es que el equipo de investigación de Mucho Gusto quiso desentrañar cómo es que delincuentes con un amplio prontuario policial son capaces de salir del país para cometer estos ilícitos.

Actualmente, Fiscalía y la PDI nvestiga a 200 personas por la emisón de pasaportes y cédulas de indentidad ideológicamente falsas, por los que se pagaba entre $1 millón a $3,5 millones. 

De esta forma, personas con prohibición para abandonar el país por delitos como robo con intimidación, robo con violencia, hurtos y hasta homicidios, han logrado cruzar nuestras fronteras para robar y traer a Chile especies como: anteojos de sol, joyas, relojes, ropa de marcas exclusivas e incluso, diamantes.

Nada de esto se podría lograr sin la participación de funcionarios del Registro Civil, que por una comisión, entregaban estos documentos con los datos de una personas sin antecedentes, pero con la fotografía adulterada.

Una de las personas que adquirió uno de estos pasaportes conversó con la periodista Paulina de Allende-Salazar.  "Ellos conseguían la persona. A mí me sacaban la foto y después la persona colocaba las huellas y todo lo demás. (...) Por $2 millones, y tenía que dar una garantía de $500 mil por adelantado", relató.

Además, indicó que en esta trama había un funcionario de la PDI involucrado. "Él hacía que las cosas fueran más creíbles, más serias". 

Javiera, exfuncionaria del Registro Civil, reveló que ella cooperó en la emisión de este tipo de pasaportes. "Tomé una mala decisión, y por problemas económicos, falsifiqué cédulas y pasaportes". Por cada uno de estos documentos, cobró $700 mil.

"Se sentaban los dos tipos, como en todas las cédulas. Cuando ya venía el colocar la huella, venía el otro tipo y el sistema me arrojaba que no coincidía. Para eso, yo tenía que volver a sacar la huella dactilar de los 10 dedos e ingresar de nuevo a la persona; ahí me arrojaba aprobado", explicó.

"En este caso, el Registro Civil debería asegurar a cualquier ciudadano que quien figura en un documento es quien dice que es, pero no es así", sentenció el fiscal Eduardo Baeza.

Revisa todos los antecedentes en el video. 

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