Rocío encontró a María Luisa en el departamento de Agustina. La tomó como pudo para llevársela del lugar donde estaba corriendo peligro, pero su rescate no duró  mucho. El captor no solo las amenazaría con el arma que portaba. Tenía una herramienta tormentosa para herir a Rocío: la verdad sobre la muerte de su madre.