Tomás iba con rastro de lápiz labial en su boca sin ningún tapujo hasta que Nicolás se dio cuenta y empezó a preguntar por ello. Pero luego en el restorán, cuando conversaba junto a su amigo y junto a Agustina, (sí leyó bien: Agustina) Gonzalo lo dejó en evidencia.

Si bien Tomás ya se había limpeado la boca, Gonzalo llegó para preguntarle por qué había ido a la casa de Rocío con Eliana. Fue ahí donde a Nicolás todo le hizo sentido.