Muchas cosas siguen pasando en torno a Samuel Diez en Verdades Ocultas, partiendo por el enterarse de la infidelidad de Angélica (María José Necochea) con Francesco (Juan Falcön), acerca de lo que destaca que "es un punto de no retorno y de una nueva vida que ambos tomarán".

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Asimismo, Raquel (Carmen Gloria Bresky) pasará a tener más presencia en la existencia de este empresario, en relación a lo que señala que "ella es su mano derecha, la única que le entiende su humor e ironía y la que entiende lo que hay detrás de toda esa cáscara que tiene Samuel, entonces no sé lo que pueda pasar con ella (ríe)", destacando que "ellos fueron pareja antes de Angélica, pero, tal como el dicho, donde fuego hubo, cenizas quedan".

A lo anterior, el actor agrega que "juntos son dinamita y se potencian porque se burlan mucho de la gente, creen que están muy arriba del resto. En ese sentido, no es una pareja muy agradable para el resto, pero entre ellos lo pasan bomba".

Y así como todo parece indicar que Samuel estará cada día más unido a Raquel, la pregunta que aparece rápidamente es ¿cómo toma el imminente matrimonio entre su hija Javiera (María Jesús Miranda) y Gonzalo (Renato Jofré)? Carvajal responde que "no se le hace nada de fácil y no se la va a hacer nada de fácil tampoco a Gonzalo. Pero siempre va a estar primero la felicidad de la hija, así que en algún lugar va a transar... quizás".

Dentro de ese contexto, Cristián relata que su papel "lo que más quiere es sacar a su hija de este cité, entonces imagínate si se llega a casar. Es un personaje que no puede vivir pensando en que su hija se relacione con este tipo de gente".