La muerte a bala de un joven ingeniero tras ser víctima de un violento turbazo en su casa, dejó al descubierto el drama que viven vecinos de Lampa ante el aumento de la delincuencia, que coincidió con la instalación de grandes tomas en sus cerros.
En conversación con Mucho Gusto, los residentes dijeron estar cansados de los robos y que el homicidio del hombre de 35 años, no hizo más que atemorizarlos y darse cuenta de que viven en un pueblo sin ley.
Vecinos denuncian abandono tras aumento de delincuencia
Ante la situación, una de las vecinas comentó indignada que "para mí no existe el Estado. Entonces, ¿qué es lo que tengo que hacer yo? Comprar un arma, armarme y ver si yo mato al ladrón o el ladrón me mata a mí".
Una dura reflexión que no es aislada, puesto que José Muñoz, vecino y locatario del sector, expresó que con su esposa viven con miedo de que sean los próximos, por lo que también se plantea armarse. "Entre irme (morir), prefiero llevarme a dos delincuentes conmigo", indicó.
Las salas cunas y jardínes infantiles también han sido víctima de la delincuencia, como el caso de Larapinta El Sol, cuya dueña, Lorena Ortíz, expresó su molestia por la proliferación de los asentamientos ilegales, deslizando la idea de que están vinculados con el narcotráfico.
"Este país se lo tomó el narco, cuando los dejaron entrar y los fueron a buscar diciendo ‘vénganse todos para acá, nosotros vamos a recibir inmigración hasta que lo resistamos’, dijo la señora esa muy elegante, la socia de (Sebastián) Piñera".