En este nuevo capítulo de la tercera temporada de Seyrán y Ferit, Ferit (Mert Ramazan Demir) fue llamado fuera de su celda por un guardia. Su padre le hizo llegar un teléfono celular que guardó a escondidas en el baño.
Allí se encontró con uno de los reos más conflictivos de la prisión. Si no fuera por Abidin (Ersin Arici) hace mucho tiempo que lo habría golpeado, pero ahora estaban los dos solos sin que nadie se interpusiera.
Ferit defiende lo que es suyo
"Oye, me sorprendes, niño rico, metiste un teléfono aquí. ¿Y nosotros qué? También merecemos uno. No te salvarás, dame ese teléfono", dijo este hombre al sorprenderlo con el aparato.
El celular era clave para obtener la confesión de Sadik (Ibrahim Mehmet Avdan), así que el nieto de Halis (Cetin Tekindor) decidió resguardarlo con sus propios puños. Con algunos certeros golpes, Ferit redujo a su enemigo y pudo continuar la golpiza, pero se contuvo.
Su otro yo lo incitaba a la violencia, sin embargo, el joven desoyó esta voz y se marchó.
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