En el capítulo 80 de la tercera temporada de Seyrán y Ferit, Kazim (Diren Polatogullari) llega hasta un hotel para buscar una pista sobre Ferit (Mert Ramazan Demir).
El padre de Suna (Beril Pozam) le pregunta al recepcionista si conoce a Tarik y le muestra una foto, pues todo indica que él lo tiene secuestrado.
El trabajador le dice al esposo de Esme que él no ha visto a ese hombre y, pese a que recibe un sabroso soborno, continúa en su postura.
Orhan recibe una importante llamada
Kazim sale a contarle a Orhan (Emre Altug) que no consiguió nada, justo cuando él está hablando por teléfono con Abidin (Ersin Arici), quien encontró un dato que los llevó a dar con el paradero de Ferit.
"Hay un restaurante al que iba Tarik, el dueño es un proveedor de pollos, lo que Tarik quiere es alquilar toda esa empresa", contó el preocupado padre.
Lamentablemente, el lugar no estaba a nombre del malvado enemigo de los Korhan, por lo que no tienen la dirección.
Afortunadamente, logran dar con las coordenadas y encuentran a Ferit a punto de morir congelado en un gran refrigerador.