Seyrán y Ferit se despidió de sus fanáticos con su último episodio este lunes 21 de julio. Tras tres exitosas temporadas, la teleserie turca realizó su adiós mostrando cómo es la familia Korhan 20 años en el futuro.
Los menores del clan, que son Tesko y Duru (hijos de Seyrán y Ferit) y Hatice (hija de Suna y Abidin), ya son adultos y participan activamente en la apertura de una galería, creada en honor de su bisabuelo Halis.
"Nos preparamos muy bien: será una inauguración increíble. Obtuvimos todos los permisos, la galería de arte Halis Korhan está lista para abrir", dijo una de las encargadas a los tres jóvenes. Una las primeras exhibiciones serán los diseños de la propia Seyrán (Afra Saracoglu).
Las historias de la mansión
Duru olvidó algo en la mansión y regresó tras sus pasos, mientras su hermano y prima la esperan: se reunirán con sus padres en el restaurante.
Mientras caminaba por los pasillos de la lujosa residencia, Duru pensó en todas las memorias escondidas entre rincones.
"Esta mansión vivió muchas tormentas a lo largo de los años. Fue la gran testigo de risas y lágrimas. Los que crecieron bajo este techo cambiaron con el tiempo. Resultaron heridos, perdieron a sus seres queridos, pero hubo algo que nunca disminuyó: el amor mutuo", reflexionaba la joven, imaginando a sus padres, tíos, abuelos y bisabuelos recorriendo la casa.
"Ahora, mientras una época se cierra, las huellas que dejamos atrás no son parte del pasado. Son más bien del futuro", agregó mientras caminaba al encuentro de Hatice y Tesko. A sus espaldas, todos los Korhan alzaban la mano para despedirse para siempre.