La muerte de la pequeña Melissa Chávez (12) tuvo un giro inesperado. Su madre, Mirta Ardiles, fue detenida por presunto parricidio e incendio, delitos por los que fue formalizada el día de ayer.

Entre los antecedentes establecidos por el Ministerio Público se cuentan la imposibilidad temporal. En el lapso de tiempo en que la madre salió del inmueble y la detección y llamado a emergencias por el incendio que ocurría en esta casa ubicada en Coquimbo, no habría posibilidad de que alguien más fuera el autor de estos hechos.

"La prueba pericial que hemos encontrado y según la línea de tiempo que hemos logrado establecer durante toda esta investigación, la imputada se encontraba sola al interior del domicilio en compañía de la niña", dijo la fiscal Yocelyn Weisser.

El juez de Garantía de Coquimbo, Diego Rubí, estableció la prisión preventiva para la imputada por 180 días, tiempo durante el cual se realizarán las investigaciones pertinentes para esclarecer el caso.

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