Sin aviso, Diego llegó a la casa de Rafael y Rocío. Está preocupado por su compañera de trabajo, a quien ama desde el momento en que la conoció. Pero Diego la encontró durmiendo junto a su hijo y a su marido.

Pero antes de partir, apareció Rocío por la puerta y lo invitó a conversar a la pieza que funcionaba como escritorio de Rafael. Ambos no pudieron contener su amor y empezaron a besarse como no lo hacían hace un buen tiempo. Pero Elsa apareció tras la puerta para pillarlos.

¿Cambiarán las cosas tras esta situación?