La ministra de la Mujer y Equidad e Género, Antonia Orellana, estuvo en 45 Minutos Con junto con la periodista Karen Doggenweiler. En la entrevista, la autoridad profundizó sobre lo que significa el rol de la mujer y el trabajo que queda desde el feminismo en la sociedad. 

En este sentido, Orellana señaló que los derechos conquistados por las mujeres muchas veces son los más afectados por el contexto político-social. 

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"Para las mujeres nunca ha sido que las cosas sean inamovibles, no solo en Chile; en el mundo. En Irán en los años 60' podían ir a la universidad y ahora están con velo y no pueden ir al colegio. En Chile por ejemplo, las mujeres pudieron interrumpir su embarazo desde los años 30' por motivos de salud. No era como las tres causales, era súper amplio y eso se perdió en el 89'", dijo. 

Asimismo, la ministra examinó nuestro actual momento histórico: "Hay una escritora -Simone de Beauvoir- que dice 'basta una crisis para que los derechos de las mujeres se pongan en duda' y ahora, efectivamente estamos en esa crisis a nivel global post pandemia". 

"Cuando hay crisis, uno siente miedo y cuando uno siente miedo, la idea del cambio no es tan atractiva porque genera incertidumbre. En ese sentido, tenemos que transmitir que el cambio puede tener certezas en el camino", agregó.

 

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El feminismo para otras generaciones

La secretaria de Estado recordó una actividad en la que se encontró con una mujer de la tercera edad que le dijo: "Es que yo no quiero que me digan abuelita. Yo no soy abuelita de nadie".

Tras sus palabras, Orellana reflexionó que la expresión "abuelita" es "como si las validáramos como ciudadanas solo porque tienen nietos y yo creo que a las mujeres mayores también les falta su revolución feminista porque ellas hicieron muchas cosas (...) trabajaron en entornos súper difíciles. Falta más conversación entre generaciones", cerró. 

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