De ser quien más adoraba a su padre, ahora Ignacia (Cota Castelblanco) no quiere volver a saber de Luis Emilio (Alejandro Trejo) en El Jardín de Olivia.
La relación se quebró irremediablemente, debido a que la menor del clan por fin pudo ver la cara oculta de su padre. Detrás de esa máscara de cariño se escondía un hombre cruel que no dudaba en engañar a su esposa, actuar en contra de la ley y perjudicar a sus propios hijos si así le era conveniente.
Estos son los cuatro hitos que marcaron el distanciamiento definitivo entre ambos.
1. Comentarios hacia Karina
Cuando Luis Emilio se enteró que Karina (Jacinta Rodríguez) es lesbiana, su primera reacción fue de rechazo. Tuvo comentarios desafortunados en su contra y una vez se enteró de que las dos estaban juntas, hizo todo lo que estuvo en su poder para separarlas, llegando a secuestrar a Gloria (Francisca Gavilán) para ejercer presión.
2. La verdad sobre la muerte de Ángela
El empresario siempre negó las acusaciones que tenía en su contra sobre la muerte de Ángela (Ana Domínguez), pero cuando Bernardita (Catalina Guerra) no pudo más y confesó lo que sucedió, Nacha se dio cuenta hasta qué punto su padre podía mentir.
3. El shock de la infidelidad
Las cosas se volvieron mucho más complicadas con la familia Guerrero, luego que Diana (Nicole Espinoza) realizara un test de ADN entre Luis Emilio y Samuel (Simón Beltrán).
Según el empresario, el solo besó a Ángela, pero Samu tenía cuatro años cuando su madre murió. Ignacia escuchó una conversación entre sus padres, enterándose del historial de engaños que acumulaba a su haber. Nacha se arrepintió mucho por haber culpado a Bernardita y tomar partido por su papá. Esto gatilló su salida de la casa familiar.
4. La cachetada
Luis Emilio sorprendió a Ignacia y Karina besándose. Toda la homofobia y agresividad que siempre había logrado ocultar, salieron a la luz, pero su hija menor le hizo frente.
Furioso, el empresario golpeó a su hija y solo la acción de Clemente impidió que las cosas pasaran a mayores. Al cruzar la línea, ya nadie de la familia quiere volver a tener contacto con el patriarca del clan.