Fue una de las relaciones que más trabas ha tenido: Javiera y Gonzalo tuvieron que mover montañas para poder lograr un matrimonio. Aunque tuvieron problemas hasta el final con Samuel, quien fue el último que intentó que su hija no se casara con el hermano de Rocío.

Pero como dicen, el amor es más fuerte, y todos los invitados que estuvieron expectantes ante una celebración que estuvo a punto de cancelarse, terminaron aplaudiendo y gritando "¡Qué vivan los novios!". ¡No te pierdas este momento de Verdades Ocultas!