Él es la víctima de su debilidad y sus hábitos. Aunque trata de mostrar lo contrario, en realidad es un hombre con un carácter débil. Le gusta el juego. Comenzó a hacerlo en sitios de apuestas en línea y llegó a las mesas de póquer en Chipre. Él tiene esta expresión congelada, el bluff, que es crucial en el póquer. Es esta expresión la que esconde sus verdaderos sentimientos.