Estos son los conflictos amorosos que marcan a Aguas de Oro
Aguas de Oro
La llegada de la familia de Karla (Carolina Arregui) ha sacudido por completo la aparente calma de El Álamo, en Aguas de Oro, la teleserie vespertina de Mega.
Más allá del conflicto por las tierras, los Ruiz-Tagle han comenzado a involucrarse sentimentalmente con algunos de los habitantes del pueblo, desatando una cadena de tensiones, secretos y pasiones cruzadas. A continuación, te relatamos algunos de estos conflictos amorosos.
Karla, Mariana, Carlos y Franklin
Durante el tratamiento de Ernesto (Héctor Noguera), Karla entabló una estrecha relación con el doctor Franklin (Francisco Ossa), quien incluso llegó a invitarla a una cita.

Sin embargo, en medio de ese encuentro, Karla vivió un inesperado acercamiento con Carlos (Álvaro Rudolphy), un instante cargado de tensión que hizo tambalear los sentimientos de ambos.
La atracción fue tal que estuvieron a punto de besarse en la oficina municipal, pero la inesperada llegada de Remigio (Claudio Arredondo) frenó el momento en seco, dejando la tensión flotando en el aire.

Por su parte, Franklin mantiene desde hace tiempo una relación oculta con Mariana (Paola Volpato), un pacto silencioso que, pese a sus deseos de transformar en romance abierto, continúa resguardado en las sombras.
Paz, Carola y Lautaro
Desde el primer instante en que se cruzaron, Lautaro (Francisco Puelles) sintió un fuerte interés por Paz (Magdalena Müller). Sin embargo, las diferencias sociales han llevado a la joven a hacer todo lo posible por mantenerlo a distancia.

En paralelo, Carola (Constanza Araya) comenzó a sentirse atraída por Lautaro. No dudó en invitarlo a pasear en su moto nueva y, con evidente interés, le propuso volver a encontrarse.



Braulio, Ayelén y Salomé
La llegada de Ayelén (Vivianne Dietz) trastocó el mundo de Braulio (Andrew Bargsted), quien no tardó en sentirse cautivado por ella. Armándose de valor, le confesó abiertamente que le gusta.

Pero justo en ese instante apareció Salomé (Ingrid Cruz), irrumpiendo con una actitud seductora y dedicándole a Braulio toda clase de halagos por su atractivo, abriendo un nuevo frente en este enredo sentimental.
